No me gusta mucho que los emails que recibo sean masivos, sino que tengan una cuota de dedicación. Y si pensás que este es un reclamo por tu email del día del amigo, tenés razón porque lo es.
En cambio yo sí voy a dedicarte unas palabras exclusivas, porque somos amigos. De esos amigos “posta”. Compartimos a nuestro modo cosas que vienen del corazón sin prejuicios. De a poco hemos forjado una amistad única en su tipo, que ha evolucionado y ha ido cambiando hasta ser lo que hoy es. Y a mí, la verdad, me hace mucho bien tenerte del otro lado como amigo. Cada aporte tuyo a mi vida ha generado muchas cosas en mí, e internamente sé que mi alma es un poco más bella cada vez que se nutre de tus palabras. Hoy las palabras no me surgen espontáneamente. Me está costando un poco escribir. Pero no quería dejar pasar el día sin dedicártelo.
Feliz día amigo.
Nota: publico esta carta íntima y especial recibida en el día de hoy, en homenaje a las amistades únicas en su tipo.
2 comentarios:
brindo! por esas amistades.
CARLOS
ciertamente una carta que es muy especial y conmueve, que bueno Daniel. Tere.
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