lunes, 22 de agosto de 2011

¿NOCHE?


Es la madrugada del último día, aquel en el que no quiero estar, aquel al que no quería llegar y por si fuera poco, por si quedara alguna duda los pájaros, el cielo, el verde, la cabaña se han confabulado en sentir la nostalgia de mi ida y me protestan todos juntos. Detrás de mí siento el rítmico gotear de una canilla que no cierra bien, que también resiste y lo demuestra a su manera. Me enrostra nostalgias el celeste del cielo tan pálido, tan tenue que parece un niño recién nacido. Me voy y llevo recuerdos adheridos de la noche, una sonrisa interminable de brillitos que titilaban, que volaban, que se desplazaban, Orión, las Pléyades, los cúmulos, me tiré de espaldas en la tierra y quedé mirando la oscuridad. Pude ver como parecía irse pintando la noche de puntos que brillaban, el guía decía que había puntos rojos, azules y amarillos, yo no pude distinguir esas diferencias pero no me importaba porque el regocijo igual era enorme, el momento sublime, ver los meteoritos cruzar el cielo, de izquierda a derecha o como fuera, no comprender su desplazamiento, su velocidad, apareciendo y desapareciendo como si el cielo o la oscuridad terminaran en algún lugar, poder seguirlos, imaginarse un juego, o sería un deseo, nunca lo sabré, tampoco importa si al fin y al cabo saber qué es, saber es lo que uno en un momento dado traduce a sentimientos o a palabras lo que pudo captar con los sentidos, los amalgama o los bate un poco y expone las conclusiones, el poema, el cuento, un cuadro, la pasión, los recuerdos. Saber es pasión. Este relato por ejemplo.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

En el cuestionamiento del título está la misma respuesta, qué lindo.
y que hermosa imagen. Marcela

Anónimo dijo...

Con la pintura de Van Gogh que escogiste no hace falta leer la imaginativa reflexión Daniel.
muy bello
Agustina

Besame otra vez, Ingrid dijo...

No desear que el día llegue. La noche y los pensares que esconden la soledad. Muy bello texto. Alberto

Anónimo dijo...

es muy cierto lo que dijo Alberto, a veces no desear que el dìa llegue.
Lily

claudia occhi dijo...

Qué bello Daniel, y qué preciso. Cuando se hace difícil entender lo que se siente, cuando no podemos con tanta belleza o tanta incertidumbre o tanto misterio; cuando la vida se revela y se rebela, entonces aparece esa necesidad de escribir o de pintar o... De expresar de alguna manera lo inexpresable.